¿Os acordáis cómo era programar una web en los inicios de Internet? Antes de que aparecieran las herramientas WYSIWYG (What You See Is What You Get, lo que ves es lo que obtienes), las webs eran código puro y duro. Si no conocías el complejo lenguaje de programación, si no te pasabas meses aprendiendo este lenguaje, no podías crear una web.
Pero de repente llegaron estas herramientas WYSIWYG para diseñar webs, como Dreamweaver o FrontPage, y crear una página web fue “tan sencillo” como crear una presentación de PowerPoint. Es cierto que estas herramientas creaban mucho “código basura” y no estaban tan bien optimizadas como las webs programadas por los expertos. Pero esto era lo de menos. Lo importante fue que se democratizó algo que estaba reservado solo para unos pocos. Cualquiera con una idea podía plasmarla en una web sin necesidad de saber programarla. Pues eso es lo que se está viviendo hoy en día, pero esta vez con el mundo del software a través del movimiento No Code.
Con la introducción os habréis hecho a la idea de qué es el no-code. Crear aplicaciones y webs sin programar. La revolución viene especialmente por el software (Crear webs sin necesidad de escribir código ya es algo a lo que estábamos más acostumbrados). La verdadera revolución viene de que cualquier persona, de cualquier ámbito o carrea profesional, puede materializar su idea digital en forma de web o aplicación.
De todos modos, tampoco nos flipemos. Que existan estas herramientas para programar sin saber código no significa que vayamos a crear el nuevo Facebook pulsando en “archivo, crear nuevo Facebook”. Obviamente hay cosas que aprender. Tendremos que aprender que es un API, tendremos que aprender sobre interfaces, tendremos que aprender sobre la propia herramienta que usemos… Pero igual que aprendimos a usar Excel, o a usar Hootsuite, podremos aprender a usar estas herramientas. La verdadera revolución viene de que viendo tutoriales en Youtube podemos hacer una aplicación bastante apañada, y no tenemos que aprender un lenguaje de programación desde 0. La verdadera revolución viene de que cualquier persona, de cualquier ámbito o carrea profesional, puede materializar su idea digital en forma de web o aplicación.
¿El no code acabará con la programación de software tradicional?
¿Esto acabará con la programación tradicional? No. Igual que el FrontPage que antes venía instalado en el paquete Office no acabó con el desarrollo web profesional. Pero es un movimiento que incluso nace dentro de la propia comunidad de programadores que poco a poco han ido creando “piezas de puzzle” autofuncionales para agilizar su trabajo. No solo van a convivir ambos tipos de programación, sino que se van a retroalimentar. Veremos pequeños proyectos que nacieron como herramientas no-code que se verán obligadas a pasar al código tradicional para crecer, y veremos programadores usando de vez en cuando estas herramientas para agilizar su día a día. Incluso puede que nazcan empresas especializadas en desarrollo no code, o una nueva profesión: “no-code developer”.
Lo que sí estamos viendo ya mismo es como grandes empresas (Como General Electric) están mezclando los dos tipos de programación al darse cuenta de que para algunos proyectos sencillos, son más ágiles presentando una herramienta no-code
De hecho, Forrester Research afirma que el no code se convertirá en un nicho de mercado que alcanzará los 21.000 millones de dólares en 2022, con crecimientos de más del 40% al año. Gartner sube la apuesta, y dice que el no code será la base de desarrollo del 65% de las aplicaciones en 2024.
David Bonilla, un programador que escribe en La Voz de Galicia, hace un símil muy interesante entre el mundo de la programación y el mundo de la construcción. Más concretamente, comparando el no code a las casas modulares prefabricadas, y las casas construidas a medida. “Las primeras pueden ser más baratas y rápidas de construir, pero cualquier personalización que vaya más allá de lo puramente cosmético quedará mal, será carísima o directamente imposible. “
Un caso práctico de No-Code: NotRealTwitter
Uno de los ejemplos más curiosos de una herramienta creada con estas herramientas no code, incluso para aprender que es el no-code, es Not Real Twitter. Se trata de un clon de Twitter que se construyó usando la herramienta Bubble. ¿Funciona igual que Twitter? Obviamente no. De hecho la propia web bromea sobre ello. Podéis probarlo vosotros mismos, pero este es el tutorial de NotRealTwitter
Bienvenidos a NotRealTwitter. Igual que Twitter, pero peor… mucho peor
El objetivo de esta web no es robarle el negocio a Twitter, es mostrar el futuro del desarrollo del software.
Porque en el 2025 la mayoría del software no estará hecho por programadores, sino por personas de diferentes ámbitos usando la lógica.
La persona que ha hecho esta web no es un programador. De hecho, no ha escrito ni una línea de código. Y lo ha construido en 4 días.
Y por favor Twitter, no nos denuncies.
¿Qué es el No-Code? La democratización en el desarrollo de software Clic para tuitearLista de herramientas no-code para crear webs y apps sin saber programar
Aquí os dejo algunas herramientas no code, ya sea para que os hagáis una idea de lo que se puede hacer, o incluso por si os animáis a aprender a usarlas.
Shopify: Crea tiendas online de forma sencilla
Airtable: Crea súper hojas de cálculo o bases de datos de forma sencilla y visual.
Webflow: Crea webs responsive para publicarlas directamente, o para exportar el código
Draftbit: Crea apps con módulos pre-construidos
Bubble: Al igual que draftbit, crea apps de forma visual, sin código.
Thunkable: Otra herramienta para crear apps con módulos “drag and drop”
Bildr: Similar a las anteriores para construir apps, pero esta te permite colaborar más de un usuario al mismo tiempo en el mismo proyecto, como si se tratara de un documento compartido de Google.
Sheet2site: crea una página web profesional y funcional a partir de una hoja de cálculo de Google
MemberSpace: Consigue que una parte de tu página web sea exclusiva para miembros
Carrd: Crea webs “one page” de forma sencilla
Zapier: Conecta apps y automatiza procesos
Glide: Crea una app desde una hoja de cálculo de Google
Pequeño disclaimer: ¿Necesitas una herramienta digital pero a pesar del no-code te da pereza llevarla a cabo? Os dejo caer que tengo una empresa de software y que hacemos software tan bonito que parece que lo haya desarrollado Apple. Echadle un vistazo a la web y lo veréis.
Lo importante es la accesibilidad y eliminar barreras
Haciendo que la creación de software sea más accesible, más y más personas materializarán sus ideas para hacerlas realidad. La creación de herramientas no estará limitada al 0,01% de la población que sepa programarlas, o a aquellos que tengan dinero para financiarlas. Si la libre difusión del conocimiento revolucionó el aprendizaje tal y como lo conocemos, imaginaos lo que se puede lograr haciendo que la creación del software sea más accesible.
Si queréis aprender más, podéis visitar el canal de Youtube «SinCodigo». Se trata de un canal de Youtube en castellano con tutoriales para hacer aplicaciones sencillas usando Bubble y Glide. Si os lleváis bien con el inglés, también podéis aprender mucho en comunidades. Por ejemplo, Product Hunt. Se trata de una web que sirve de escaparate para que los makers muestren sus apps a la comunidad. Hay de todo, no todas las herramientas son no-code. Pero es una buena plataforma para darlas a conocer. Otra comunidad de apoyo y aprendizaje es IndieHackers. En este caso un foro donde los makers intercambian feedback y aprendizajes.
¿Tienes pensado hacer una app? ¿O una web? ¿Sabes como hacerla atractiva? Te recuerdo que tengo un curso de gamificación donde aprenderás a añadir mecánicas de juego a tus experiencias digitales (o analógicas) para hacer procesos atractivos y que enganchen. Puedes hacer el curso con descuento aquí.
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