En el mundo del diseño del videojuego existe el término “elegancia”. Un juego elegante es un juego en el que con muy pocos elementos sencillos puedes ejecutar muchas acciones complejas. Tantas que incluso puedes tardar años en perfeccionar tu técnica. Pokémon fue un gran juego elegante. No me sorprende para nada la revolución que supuso su lanzamiento hace ya 20 años. Pero esa elegancia la perdió por el camino.
De eso precisamente trata mi post en Innovación audiovisual: Quiero que Pokémon vuelva a ser un juego elegante y que os invito a leerlo entero. Originalmente Pokémon era como un Mentos y una botella de Coca-Cola: con dos elementos teníamos una mezcla explosiva. Ahora mismo con Pokémon tenemos el supermercado entero, y la experiencia no es la misma. En los productos digitales, más no siempre es mejor.
CURSO DE GAMIFICACIÓN. Apúntate ahora y obtén un 20% de descuento. Empieza a gamificar YA.